La xenia es un popular y duradero coral una vez aclimatado.
Sus pólimos pulsan y se mueven atrapando los nutrientes que pasan en las corrientes de agua.
También se conoce como coral pulsante, el cese del movimiento pulsante a veces ocurre por razones desconocidas.
Esto no es un signo de muerte o de la mala salud, ya que la Xenia puede vivir y crecer sin hacer su movimiento característico.
Este coral tiene un nivel medio de la agresión y como método de crecimiento se incrusta en la roca y las superficies de vidrio, haciéndose en ocasiones óptimas una auténtica plaga.
El flujo de agua y la iluminación debe ser de media a alta.
Sin duda se beneficiarán de la alimentación de alimento congelado, así como de los alimentos destinados a animales filtradores.
El calcio y el estroncio, le ayudará a conseguir un crecimiento continuado.
Cuando se ve amenzazada la Xenia segrega una capa de mucosidad, esta capa debe ser enjuagada en agua salada antes de su introducción en el acuario, y así evitar que el coral muera.
Durante el envío, este recubrimiento puede llegar a ser bastante grueso, y puede causar asfixia si no se elimina correctamente.